Descripción
El estadio, nueva sede de la Liga Mexicana de Béisbol (LMB), estará equipado con un techo de acero ligero en forma de horca de diablo y dará cabida a 13.000 espectadores.
Uno de los aspectos importantes de este proyecto ha sido la capacidad de suministrar gran cantidad de equipos, 810 toneladas en los plazos acordados. El cliente ha seleccionado los sistemas ULMA por su capacidad de carga y una menor ocupación del espacio que ha permitido circular sin interferencias por toda la obra.
Solución ULMA
Las 12 torres de cimbras MK han soportado las 8 estructuras de la cubierta de 550 toneladas cada una. Dependiendo de las cargas, se han configurado torres de 4 y 8 pies con una altura máxima de 26 metros.
La capacidad máxima de carga y la estabilidad de las torres resistieron, sin problema alguno, los dos seísmos de magnitud de 7,1 grados en la escala de Ritcher que provocaron grandes daños en la Ciudad de México y otras provincias.
El proceso de montaje de las torres ha comenzado sobre el terreno con el ensamblaje de sus componentes en módulos. Con una grúa se han desplazado a su correspondiente lugar y se han unido verticalmente. Cada torre está equipada por sistemas de comunicación vertical, escaleras, además de plataformas con barandillas que garantizan el cumplimiento de todas las normas de seguridad.
El movimiento de las estructuras de la cubierta ha requerido el empleo de maquinaria pesada, entre ellas una de las mayores grúas del mundo. Por esta razón, ha sido necesario reapuntalar varias áreas ya ejecutadas para reforzar los puntos de apoyo de las grúas.
El proyecto de construcción de este espectacular estadio de béisbol, arquitectónicamente moderno y funcional, ha supuesto un gran reto técnico y logístico superado con éxito dentro de los plazos de ejecución acordados.
